septiembre 9, 2020

Prácticas biodinámicas

Las prácticas biodinámicas se aplican a todas las fases del cultivo.


En el suelo se han incorporado, de forma espontánea, cubiertas vegetales de gramíneas y leguminosas creando una biodiversidad y microclima diferenciador, que a su vez atrae fauna auxiliar (mariquitas, avispilla thichograma etc), que ayudan a combatir plagas y enfermedades.


Estas cubiertas, producen un estrés hídrico al cultivo, restando agua a las viñas, lo que reduce considerablemente el tamaño de la baya o uva, obteniendo una mayor concentración polifenólica (tanino, antociano, etc).

Para combatir las plagas y las enfermedades criptogámicas, además de la biodiversidad existente, se utilizan infusiones, decocciones o fermentaciones de plantas medicinales.

Todas las actividades relacionadas con el cuidado y el desarrollo del cultivo se realizan teniendo en cuenta las fases lunares y otras circunstancias astrales que afectan tanto a la planta como al suelo.

La poda se realiza a pulgares de dos yemas, tres a cada brazo, sistema cordon- rouge. Siempre en luna descendente y preferiblemente englobada a fase menguante y en la constelación que se pretenda representar más tarde en el vino.

Se realizan dos pases de poda en verde, siempre en luna descendente, con la finalidad de eliminar carga y mejorar las cualidades de los racimos restantes debido a una mayor porosidad de la planta, luminosidad y aireación.

También se realizan dos deshojados, siempre en luna descendente, el primero justo después de floración en la zona de menos incisión solar que suele corresponder con el naciente de sol. En este primer pase se eliminan racimos que se han unido a otros en su crecimiento, se produce un aumento de porosidad-aireación en la planta, por lo tanto una mayor sanidad. El segundo, no menos importante, se realiza aproximadamente un mes antes de comenzar la vendimia. Se eliminan los racimos que llevan consigo un retraso en la maduración, aquellos que aún no hayan enverado. Esta segunda acción es fundamental para la no proliferación de la botritis cinérea o podredumbre gris.


La vendimia es manual, con luna descendente, relacionada con la constelación apropiada al vino a elaborar. Se debe elegir también el tipo de día de acuerdo a prácticas biodinámicas:

Días Flor: Ofrecen mayor aromaticidad, especialmente indicado para vinos rosados.
Días Fruto: Mayor frutosidad. Indicados para vinos jóvenes y de corta crianza.
Días Raíz: Especialmente indicados para vinos de Terroir de larga crianza.

El abono se elabora con basura de oveja y compuestos vegetales de la vendimia (pieles, raspones y pepitas). En el compost se introducen los preparados biodinámicos de plantas (milenrama, diente de león, ortiga, corteza de roble, manzanilla y valeriana). Su aplicación se realiza coincidiendo con la conjunción astral indicada.